El PSC y ERC han pactado aplicar de facto el Decreto Lingüístico suspendido cautelarmente por el TSJC el pasado 5 de julio
El contenido del acuerdo en el ámbito de la lengua marca el camino hacia la expulsión del castellano de la vida institucional catalana y se propone garantizar su exclusión de las aulas.
El PSC asume íntegramente las tesis nacionalistas que pretenden que solo el catalán tenga las atribuciones que corresponden a una lengua oficial y que el castellano y por tanto los ciudadanos que lo tienen como lengua materna, renuncien a sus derechos.
La escuela catalana tiene como objetivo garantizar el aumento de hablantes del catalán y para ello se fiscalizará el trabajo de docentes. Ni los alumnos ni las familias tienen derechos lingüísticos, solo deben acatar el proyecto lingüístico de una escuela monolingüe en catalán.